Amados hijos de la Conciencia Cristica
hablamos en nombre de los Consejeros Espirituales Solares
Os pedimos que mantengáis la atención y las debidas precauciones, pues estamos absorbiendo y transmutando las negligencias acumuladas en vuestro planeta. Este proceso abre en cada uno de vosotros las puertas al despertar masivo de la vida intrínseca, aquella que habita en vuestro interior desde siempre.
Nuestra llamada no ha sido recibida plenamente, pues existen círculos oscuros que aún interfieren, proyectando ideas contrarias y manipulaciones intensas. Debido a estas distorsiones, vuestra comprensión sobre nosotros y sobre las procedencias estelares no se desarrolla con la claridad que sería necesaria.
Recordad que la verdad se revela siempre en proporción a la conciencia espiritual de cada ser. Aunque los acontecimientos planetarios están muy avanzados, la vida continúa su curso. Os acompañamos en una transición que impulsa transformaciones profundas en la humanidad. Sin embargo, la forma en que muchos terrestres conciben la realidad dificulta ofrecer una solución que abarque a todos, especialmente teniendo en cuenta que la Federación Galáctica sostiene el equilibrio del planeta y de sus habitantes según su propio plan.
Las naves que se despliegan alrededor del mundo realizan vigilancia, observación y pruebas de sostenimiento. Muchas de las situaciones que veis surgir han sido generadas por ellos mismos con fines de verificación y preparación de eventos próximos, cuyos tiempos y formas aún no pueden ser revelados. Desde la apariencia de normalidad que percibís, coexisten procesos energéticos profundos que están transformando la estructura de la Tierra.
Existen razas que no permiten que otras ejecuten plenamente sus tareas, debido a diferencias en propósitos e intereses. Mientras tanto, la humanidad alimenta sus dudas e incertidumbres, y la información continúa fragmentada y manipulada. Las naves lenticulares que muchos habéis observado, conocidas como platillos o vehículos lumínicos, se mantienen a la escucha, sensibles a cada movimiento energético del planeta.
El mayor desafío sigue siendo la gran parte de la humanidad que permanece dormida. Aquellos que aún no reconocen estos procesos consideran normales los patrones caducados de su vida social. Aunque muchos están despertando a un primer nivel de conciencia, necesitan abrirse a planos más profundos de sensibilidad para comprender el espíritu y las verdades universales que siempre los rodean.
A causa del antiguo ciclo bíblico y de la densidad heredada, muchos han encarnado de nuevo sin memoria, pero con la misión de corregir sus errores pasados. En otros tiempos fueron poseedores de las sabidurías que hoy rechazan por haberse separado de la Fuente. El velo del olvido los mantiene aferrados al mundo que conocen, y por ello continúan recreando una realidad corrupta desde lo que creen comprender.
Nuestra labor es reconectaros con el cuerpo causal sagrado. Vuestra divinidad interna fue fragmentada hace siglos, y los diez vórtices de energía crística —lo que en vuestro lenguaje llamáis ADN— son las puertas que os vinculan con vuestro origen divino.
Para restaurar esta unión, debéis abrir la conciencia, asumir el conocimiento que os ofrecemos y recordar los actos de vuestro pasado. Solo así comprenderéis vuestra procedencia y el propósito profundo de estar encarnados aquí y ahora.
Os acompañamos con amor,
siempre presentes, siempre atentos
al despertar de vuestra verdadera esencia.
