2019 acabó la divulgación de todos los temas extraterrestres...
En el 2019 terminó la divulgación de todos los temas extraterrestres.
En mi entendimiento, y desde la experiencia, todo eso ya concluyó. La información recibida de los guías extraterrestres está dirigida a la humanidad y la nueva conexión de crear un despertar masivo es a través de los guías extraterrestres que ellos eligen. Esto está sucediendo en la actualidad, sin embargo la situación actual continúan administrando información, charlas y demás. Hoy los nuevos conferenciantes se mueven en internet y en los medios televisivos, pero, como mencioné al principio, el ciclo se cerró (1975-2025). Quienes permanecen dormidos no van a cambiar, porque no sienten interés ni curiosidad por investigar. Ni siquiera utilizan los medios electrónicos para mirar o indagar.
Sí, entramos en un nuevo ciclo, pero la divulgación continúa igual, y esto demuestra que todo se definió en aquel momento. Además, hubo un salto cuántico de aprendizaje, el cual no conoceis de manera que muchos pasaron del aprendizaje consciente a lo no consciente (los “dormidos”). Por lo tanto, el ciclo que ahora les corresponde es extender el mensaje, aunque aún no estén preparados. Aun así, se encuentra dispuesto así: tienen toda la información necesaria para su comprensión, pero las energías de su pasado dificultan sus nuevos aprendizajes, llenos de experiencias renovadoras y de la posibilidad de sentir cada átomo de su procedencia.
El ciclo se completó y ahora solo continúa repitiéndose. En mi experiencia, este esfuerzo apenas cubre una pequeña parte, y ni siquiera se sabe si está generando resultados reales. La humanidad se siente apartada de ello. Ya no hace falta tanta divulgación: todo está al alcance; todo está en internet. A esto se suma la presencia de miles de contactados “durmientes” que aparentan estar despiertos, con sus relatos sobre los llamados hermanos de las estrellas, experiencias extensas y variadas. Todo tiene una explicacion no conocen el sentido profundo de los mensajeros que les llega, consideran todo como aceptable para reconocer sus enseñanzas que proliferan este mundo para entender como funciona los eventos y sucesos en la Tierra, todo ello es valido para los cambios que necesita la humanidad.
Esto es, en definitiva, lo que tenemos.
Los antiguos buscadores de la verdad, aquellos que profundizaban en los conocimientos extraterrestres, quedaron en el "olvido". Solo persisten sus testimonios y vivencias, algunos de los cuales todavía pueden encontrarse en espacios públicos de la red.
¿Qué está ocurriendo?
Como señalé antes, el ciclo de comunicación mediante conferencias llegó a su fin. Ahora corresponde a los seres extraterrestres conectar y dialogar directamente con los humanos terrestres. Así está escrito, aunque no se manifiestan con cualquiera, sino con quienes poseen cierto bagaje de experiencias, tanto en esta vida como en otras anteriores.
Los seres de Ganímedes siguen trabajando por la paz del mundo. Su forma de contacto con los humanos ha cambiado, pero su propósito permanece: divulgar el conocimiento extraterrestre. ¿Cuál es entonces la diferencia entre un contactado de la generación de 1975 y los comunicadores actuales? No existe una diferencia sustancial, solo una nueva forma de transmitir el mensaje.
Hoy disponemos de internet y de múltiples medios de comunicación, aunque los canales televisivos continúan recurriendo a los mismos temas del ámbito extrasensorial.
¿Quiénes son ahora los nuevos comunicantes extraterrestres con los humanos? Son los mismos de siempre. Ganímedes cumplió su función y continúa su labor, aunque desde otro plano. Ahora otras razas colaboran con la humanidad con la misión de despertar la conciencia, fortalecer el pensamiento y ayudar a los seres humanos a separarse de la matrix.
Todo esto forma parte de una preparación mental y espiritual que busca mantener vivo el impulso cósmico: una especie de grabación interior que nos recuerda que nuestra existencia es real y que se desarrolla aquí, en la Tierra, no en una ficción.
Hablemos, entonces, de las frecuencias de Júpiter y de su luna habitada, Ganímedes. Estas entidades que sirvieron, trabajaron y entregaron su energía vital siguen presentes en la Tierra como observadoras del plan cósmico en desarrollo.
En el futuro intervendrán nuevamente, en una operación interestelar destinada a quienes aún carecen de este conocimiento, para ayudarlos a elevar su conciencia y así continuar aumentando la frecuencia vibratoria del planeta.
